Diario de una huelga (en Airbus-Illescas): día 3

Tenemos claro que es importantísimo regular bien las fuerzas físicas y psicológicas, así que hemos hablado de cuadrar bien los turnos de presencia, pero no hay manera. Eran las 12 de la noche y no se quería ir nadie. Hemos dicho una y otra vez que con 4 personas durante la madrugada es más que suficiente y hoy nos hemos quedado 11. La guitarra y un chupito de ruavieja hacen milagros.

La mañana ha comenzado con algo de bajón por el desgaste que va haciendo mella, pero ya lo sabíamos y seguimos a piñón con la defensa de aquello que sabemos hacer y para lo que estamos aquí desde hace más de media vida: trabajar.

Nos llega desde dentro que está casi toda la planta de abajo parada con la plantilla de Airbus dando vueltas de un lado para otro. Les han dado subactividad en lugar de bolsa. Nos dicen que es la táctica que se suele utilizar para endosarle esas pérdidas económicas a la empresa que tendría que prestar el servicio y no lo hace por motivo de la huelga. Parece ser también que aprovechan para dar cursillos de mentirijilla a la plantilla de Airbus con tal de no tenerles ociosos.

Diario de una huelga: día 3Ya están en marcha las diversas denuncias por despido colectivo y por cada despido individual, por lo que hemos recogido en un tiempo record en los distintos organismos los certificados necesarios, nóminas, vida laboral, etc. para poner las diferentes denuncias. Hemos recopilado sentencias del tribunal superior de justicia y del supremo con casos de subrogación muy semejantes al nuestro que son muy favorables para nosotros.  Como una parte importante es la difusión, nos están echando un cable para hacer llegar el conflicto y las fotos del campamento a Toulouse y Hamburgo.

Vuelve a llover y ampliamos la instalación con una pérgola y un tabicado de madera para protegernos del molesto y frío viento. Hay un goteo continuo de donativos económicos en la hucha. Cualquier aportación es bienvenida y agradecida. La huelga tiene un coste económico que no podemos obviar. Ya pensaremos en cómo apañarnos el mes que viene. Saldremos adelante.

Nos trasladan que ha habido una asamblea en Airbus en la que insisten en no mostrarnos su apoyo. Trasladan miedo y anestesian cualquier tipo de lucha por nuestro puesto de trabajo. Mienten diciendo que estábamos recolocados. Aquí no se veta la entrada a nadie, sino todo lo contrario. Esto no es ningún precipicio; es un grupo de trabajadores que han decidido luchar por su trabajo y su dignidad dando un ejemplo para cuando les pase a los demás que vendrán luego. Ojalá no tenga que verse nadie en esta situación. Nosotros tampoco nos lo podíamos imaginar hasta que nos la han liado. A pesar de todo, vivir esto nos hace más fuertes, aunque estemos pasándolo reguleras a ratos. El trato humillante que hemos recibido nos da coraje para no bajar la guardia. Por eso, se lo transmitimos a los demás una y otra vez.

En Getafe siguen también en la puerta, aun habiendo sido todos subrogados. Ahí están como campeones y lo celebraremos con ellos cuando esta lucha termine.

Se va acercando la noche y nos vamos preparando para intentar descansar y tener un rato en solitario de reflexión hacia dentro. Estamos viviendo momentos entre nosotros que no habíamos experimentado nunca a pesar de llevar años trabajando juntos. Pero esto es diferente. Son sensaciones, miradas, bromas o pequeños gestos que no olvidaremos nunca, pase lo que pase.

Compañeros de Airbus, agradeceros a todas las personas que venís a recibir información de primera mano, dejando de lado las mentiras “oficiales” que lo único que hacen es desprestigiar toda esta lucha en pro de otros beneficios. Vuestro cariño también nos ayuda a continuar, igual que el de todas las subcontratas que salen A DIARIO,  esperamos que poco a poco el resto se vaya uniendo a esta lucha que es de tod@s.

El olor a humo impregna nuestra ropa, el pelo, el coche, nuestra casa cuando llegamos. Estamos seguros de que este es el olor de la victoria. A por el jueves.

Salud.